sábado, 16 de noviembre de 2013

Ganas de ti.

Llegas a casa. Al sentir tus pasos sonrío incoscientemente, me levanto de un brinco y voy a recibirte.
Al darte cuenta de mi presencia me miras de arriba a abajo e inconscientemente te muerdes el labio inferior. Dejas lo que estás haciendo y tus manos cogen mis mejillas como si de cristal se trataran, con mucho tacto. En cambio, tu boca me dá a entender todo lo contrario. Nuestras lenguas se unen como si no hubiera un mañana. Y entre beso y beso hay miradas de complicidad.
Me coges en brazos y puedo escuchar tu respiración entrecortada mientras me vas besando el cuello con pequeños besos pero transmitiendo mucho sentimiento.
Yo no puedo hacer otra cosa que enredar mis manos en tu pelo y dejarme llevar. En un momento llegamos a la habitación  y me dejas cuidadosamente en el suelo. Empiezas a dar una vuelta  hasta quedar detrás de mí. Yo me siento intimidada cuando  tu mirada se clava en mí.
Me empiezo a poner tensa cuando siento tu cálido aliento en mi oído al escuchar las palabras ''Eres mía. Solo mía.'' haces que me recorra un cosquilleo por todo el cuerpo.
La tensión disminuye cuando me acaricias mi hombro desnudo y mi cuerpo parece gelatina a la espera de que un niño se la coma de un bocado.
La ropa sobra entre él y yo.
Él me vuelve a coger en brazos y con un beso en la frente me deja en la cama. Me dedica una sonrisa pícara y yo no puedo evitar reírme. No tarda en meterse en la cama y me empieza a acariciar el pelo, enredando sus dedos en uno de mis rizos rebeldes.
Puedo notar su dureza detrás de mí. Él parece percatarse de lo que estoy pensando y no tarda en ponerme boca arriba.
Ambos sonreímos y en esas sonrisas hay promesas y sentimientos.
Nos besamos apasionadamente y puedo sentir su miembro dentro de mí. Nuestras bocas siguen unidas pero su boca está abierta y puedo sentir su cálido aliento en mi boca. Su
respiración se acelera cada vez más, yo muevo mis caderas al ritmo que él está marcando. Llega al orgasmo gritando mi nombre.
Y yo solo tengo fuerzas para decir ''Quiero que seas el último en todo lo que tenga que ver conmigo.''
Y me quedo dormida en su pecho mientras él acaricia mi pelo...
 

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